Acá .

Ya no existe acá. Hola, qué tal, buenas noches, vengo a hacer mi declaración. Cambió el formato de esta cosa, no sé si me gusta, pero tal como hablamos el último miércoles en la facultad, por lo general la primera reacción del individuo frente al cambio de la interfaz es no positiva (como el voto de Cobos) y luego, por costumbre, comodidad o lo que fuere, termina resultando simpática, o tal vez porque la imponen y no nos queda otra, como la nueva biografía de Facebook. Que sea sábado, a esta hora, en esta época y que la temperatura comience a bajar me trae claros recuerdos del año pasado, en fin. Creo que mañana voy a tener un grato almuerzo, como a las cuatro de la tarde pero almuerzo al fin, con una necesaria charla. Por fin encontré un alguien en quien depositar mi confianza, charlar temas sin pudor y llorar si es necesario. Dormí solamente tres horas pero acá estoy, esto soy, igual ya debería irme. El mundo de twitter se me está volviendo vicio, por lo que ruego a quien sea que no salgan más redes sociales porque después me terminan copando todas y nada, básicamente eso, no da. En otras noticias, creo que se rompió el lector de tarjetas sd de mi pc, un garrón, menos mal que encontré por ahí un cable usb para la cámara. Y después, lo de siempre, paciencia, paciencia para entender y comprender todo, menos mis vecinos, a quienes ni bien termine esto les voy a revolear unos cubitos por estar gritando. Había pensado en tirarles huevos pero están caros y no da andar desperdiciando comida. Claro, si me escucha Pino Solanas me mata, con esto de que el agua vale más que el oro y demás. En fin, tengo cholas nuevas, y muchas galletas de arroz.

Los miedos que producirán tu depresión .