Salta .

Con paciencia de artesano, dicen, no se equivocan. Con esa paciencia un artesano sobrelleva una estafa y sigue en pie por sus hijos. Mirá vos, qué increíble, y yo con ganas de llorar porque mis profesores me dijeron que mis problemas los tengo que trabajar yo y después ir a la facultad. Ojalá pudieran aprender de ese tipo, ojalá yo pudiera aprender de ese tipo también. Lamento horrores no poder haberle dado el número de Defensoría del pueblo, pero claro, me olvido de cómo vivo. No te irrites contra el karma, nos dicen en meditación, pero el martes me puede, el martes me hace retroceder en todo lo poco que creía haber avanzado. Y otra cosa, ya no existen dudas de que odio, detesto el número cuatro, aunque no debiera tener esos sentimientos en mi interior. Son todas falsas existencias, yo soy una falsa existencia y este blog también lo es. Sí, estoy pesimista, muy pesimista porque me molesta haber intentado abrirme para explicar por qué me quedo callada y que me hayan humillado. Odio ser así, detesto ser quien soy, como cantaba en el dos mil seis, y odio que siempre se me ocurran las mejores respuestas cundo estoy sola. Pero es que para ser distinto no se necesita más que eso, verdad? Bien, está todo mal, todo mal menos una pequeña cosa, que me demuestra como cambia el sentido de algo con solo agregar una palabra: detesto morfo, amo las morfo fests.

A blanquearlo, dale .

Arruinarse .

El día venía bien, muy bien, de hecho fue un buen lunes. Pero claro, se acerca el martes y es matemático, ¿qué es toda esa tristeza junta? No está bueno verla en los demás, tampoco me gusta ver en el país, o en el mundo que vivo. ¿Y si no me vienen a buscar? No sé. No entiendo nada, de nada, pero de nada de verdad y quiero tirarme al piso a esperar, porque yo sé lo que espero, y lo proyecto todo el tiempo. Necesito esa calma, hacía mucho que no me sentía así, puedo cerrar los ojos y recordarlo. Qué mal estás meri, pero qué bien te fue en diseño ¿Y? Sí, sirve para que alguien más me recuerde por lo que hice, supongo.

Todo lo que me faltaba .

5049

La novena esfera, sin dudas. Los sábados se están volviendo cada vez más y más geniales, ayer sumamos mañanas al combo perfecto, increíble. El horario... sí, el horario debería planteármelo pero bueno, ya dije que el rock no tiene horarios, aunque lo dije por llegar tarde, no por volver a mi casa a las diez de la mañana, eso no estaba en los planes. Pero después digo, si estoy toda la semana abrumada entre trabajo y facultad... ¿por qué no voy a darme ese permiso los sábados? Es claramente genial, no me sale otra palabra para definirlo. Sumamos además Fan Van, por dios, nunca pensé que me iba a reír tanto, aunque no redujo mis ganas de escucharte cantar, y lo pesada y caprichosa que puedo ser si no me dan lo que pido, y las incoherencias que puedo decir si siento que fallecí a causa de la vergüenza. Que me hayan hecho decir que iba a votar a Pino es casi, casi imperdonable, pero tengo bastante para equilibrar esta balanza. No puedo dejar de sentirme bien por poder -al fin- mostrarme como soy, o lo más parecido a eso, hablar de mis problemas de adicciones y nssi como cuento que fui a la librería y había mucha gente. Tengo gente ayudándome, gente nueva, gente de siempre, y de verdad espero que sean infinitos, a los que se fueron los dejo, siempre dije que puedo convertirme en un problema y no es la idea, pero si quieren volver, acá no hay rencor, podemos charlar de la vida misma. Así que creo que es momento de agradecer, aunque tal vez no sea la forma y el lugar, pero todavía me cuesta dar todo en persona, así que las gracias vienen por acá, a quienes me ayudan a sobrellevar esta pesadilla, y quienes hace entretenida la espera del cataclismo que se viene. A ustedes entonces, gracias colegas.

El país está tan mal porque hay gente que se levanta los domingos a la mañana temprano .

Suiza .

Qué mal me siento, pero qué mal me siento verdaderamente. Bueno, vayamos a armar las valijas, no, todavía no, de hecho no creo que arme valija. Vayamos a prepararnos para todo esto que se viene, o mejor esperémoslo así, que por algo estamos acá. Vayamos por unas cervezas y buena música entonces. Sí, el frío me está haciendo mal, ya lo había advertido.

Paz.

Blanco .

Dame lo que me falta de silencio para contestar... Basta de sucesos extraños, paso a narrarle resumidamente la historia del día. Subo al 26, el único asiento vacío, y gente de pie. Tenía sueño así que ni lo dudé, me senté, pero había un papel doblado donde yo debía sentarme. Como intento cuidar el planeta -aunque sea un poquito- agarré el papel para no tirarlo, se me da por mirarlo, pensando que sería un folleto de esos que te dan en la calle, pero al hacer esto descubro que era una hoja de un calendario bíblico. ¿Con qué número? El siete, inexorablemente. Guardé el papel en la cartera, y seguí mi camino. Fui de shopping, que era la intención, y ya de noche en casa y luego de haber ido a meditar recordé que tenía ese papel ahí guardado. Lo agarré para mirarlo, y para mi sorpresa, no solo tenía el número siete, sino que también tenía el día martes, no es que quiera perseguirme pero... algo está pasando. Leo el pasaje bíblico, y lo relacioné mucho con mi viaje y con el momento que estoy atravesando, hablaba de querer escapar, y encontrar un refugio en Dios. Casualmente en meditación habíamos hablado de este tema, siempre virado al universalismo porque ellos no imponen un solo dios como figura. Y hablamos sobre la liberación, sobre poder cruzar este océano de una vez y llegar a la orilla, "más allá de todo, más allá en la orilla, liberación". Increíble, pero cierto, una vez más. Miro nuevamente el papel en busca de información, martes 7 de octubre de 2008. Mirá vos, encontrar un papel de casi tres años de antiguedad en el asiento de un colectivo... nada raro, supongamos. Voy a mi base de datos, entiéndase, fotolog, para ver qué había sucedido en aquella fecha, y fue un día que tuve la clase de la facultad en la plaza San Miguel de Garicoits, cuando cursaba CBC y estábamos con el tema de las pérgolas. Ese mismo día, había ido a sacar las entradas de ska-p, el primer y accidentado recital de ska-p. "El Señor está cerca", la primera frase del papel, que tiene un formato que debe rondar los 10x7cm. calculo. Recién, sin hacer caso a la recomendación de no seguir buscando relaciones, me puse a ver el resto de los números, los típicos 28:15-8 y esas cosas que indican los pasajes. El primer número, sumándolo cabalísticamente o de manera normal, da 6, dado que suma 24 o 15; increíble. Ahí tenemos, algo oscuro. Bien, sigo leyendo, suma 16, o sea, de nuevo 7, de nuevo el triunfo espiritual. La cita siguiente vuelve a sumar 16, y la anteúltima suma 7 conciso, sin vueltas. Y la última de las citas suma 8, la paciencia. Tenemos entonces, algo oscuro, tres triunfos, y paciencia... No entiendo nada, tengo miedo, y estoy al borde de un colapso mental. Voy a pedir lo de siempre entonces, un abrazo, que me digan que mañana sale mfest y tratar de no caer, ¡vamos que falta poco!

Haber vuelto incluso después de ya tener el boleto del bondi, eso es ternura .

Vidrio .

Contar defectos con todo el miedo del mundo en tan poco tiempo, y que encima traiga consecuencias positivas, suma mucho, pero mucho a esta trama. Ni hablar si encima me responden diciendo que ya sabían, que no pregunte el por qué, pero que no era necesario aclararlo. Mirá vos, tanto nerviosismo para nada, o tal vez sí, para demostrarme que el hecho de que los demás me vean tal cual soy no siempre puede ser negativo. Vamos que seguimos sumando eh, y vos, dos mil once, a las patadas me tenés, de lo que deduzco que pueden suceder dos cosas. O bien todo da un giro tan rotundo como inesperado y canto viva la vida, o terminamos peor que en el dos mil seis, solo para demostrarme que soy malísima inventando teorías y debería dedicarme a otra cosa. Pero claro, también puedo aplicar otras hipótesis que salen de conocimientos más recientes, como que el dos mil seis era el ocho, por ende la paciencia, y este año es el cuatro, número al cual siempre le hice cara de asco y recordé la frase cuatro de copas. Dieciocho días, que vienen empeorando y nadie sabe cómo terminarán, hasta que llegue el día clave. ¿Y después? Después se verá, para algo improvisamos tanto merock.

¿Vas a sacar mis malos hábitos rápidamente? Eso quisiera .

NSSI .

Ese tema sí que no se supera, aunque a esta altura debería convencerme de que no superé ninguno de esos conflictos. Plantearme el hecho de vivir a energizantes y cigarrillos no puede estar bien. La lluvia de ayer me hizo ver lo mal que está todo, o lo mal que estoy yo dentro de este todo tal vez. El otoño me gusta cuando hay sol, y cuando las hojas son amarillas, ya llegó esta etapa en la que todo es marrón, y ya se vino el frío también. No quiero el frío si no tengo un abrazo calentito, no quiero el frío si no te tengo a vos. Tengo tanto miedo, de nuevo, de errar. La oscuridad no hace bien, la lluvia ya tampoco, ir mirando las hojas mojadas en el cuadro del vidrio del 128 me hizo pensar en cosas que tal vez no debería pensar: nssi. En cualquiera de sus expresiones, sea cortarse, drogarse, vomitar, no comer, consumir sustancias solamente para ver si algo malo pasa, por el solo hecho de saber que no me importa si así sucede. El pánico que siento cada vez que viajo en auto, pero las ganas que eso me genera sin embargo, ir a la facultad en auto es sin dudas bonus track. Aunque lleguemos tarde, aunque tenga toda esa sensación de terror, no quiero cambiarlo porque muchas veces dije que era un pequeño sueño, y se está cumpliendo, otro más para la lista. Y los celos, los celos que siempre son un tema porque parece que si no soy celosa de todo el mundo no soy yo. Los enojos que no son enojo y el autismo, las ganas de abrazar y que me abracen, contenidas por una cobardía que es consecuencia de mi maldita inseguridad. Me quedo con el tatuaje, y las conversaciones que fueron desde la facultad, hasta las sectas y las letras de las canciones de Shaila. Esperar el fin de semana vuelve a ser el único indicio de vida durante la semana, pero es bueno si es compartido.

Cantame una canción así me duermo tranquila, alejá todo esto de acá.

Puto .

Tomá, forro, me llevaste un día de puro stress pero te recuperé. Sí, casi pierdo el blog, de hecho tuve que cambiar la cuenta. Todos pu pu pu, eeeeh viva Zapata.

Flotar .

Vos vení, vení corriendo a darme un abrazo mientras yo espero con la cara demacrada y en pijamas. Pero intentá no demorarte, ya hace frío y los puchos no son una buena compañía. Insistiré en la idea de que este frío, este invierno puede ser una catástrofe si no encuentro aquello que tanto anhelo.

Cariño rápido, un ticket hacia vos .

Thing 2 .

Me encanta que cada vez que le digo algo a una persona, me doy cuenta de que en realidad debería decirmelo a mí, lo bueno es que se lo digo a gente que me hace ver esto. Le dije sectario a mi hermano, y me hizo ver que quien se estaba metiendo en una secta era yo, le dije nazi, y la respuesta fue algo como "yo no voy a una secta neonazi". Ajam, perdí la memoria por un lapso de tiempo que al parecer fue de una hora, esto lo supe gracias a una persona que me mantuvo en vilo hasta altas horas, haciéndome preguntas que me permitieran recordar la mayor cantidad de cosas posible. De nuevo, ese bondi, esas calles, esos taaantos porteros automáticos, esa música de mierda, el pucho, la cerveza, los documentales de Discovery y vos. Perdón si te derribo los ídolos de la infancia, es mi inevitable adicción de resolverlo todo, y desconfiar. Me cuesta creer que pasé tantas horas sentada haciendo un esfuerzo sobrehumano por recordar lo acontecido, y que diste todo de vos para formular preguntas que me ayudaran a resolver esto. Ya no quería pensar, pero era necesario, y ahí estabas vos para ayudarme, qué bueno es encontrar ayuda sin buscarla. ¿Que yo soy nerd? No, gran error ese, pero te lo dejo pasar. Y de nuevo el tema del horario, diez minutos menos que se convirtieron en una hora más bajo la lluvia mientras veíamos pasar gente, cuatro personas esperando a que abra una panadería con cuenta regresiva, y la mediocridad de la policía federal mangueando facturas, mientras la metropolitana vigilaba la esquina. Mucho más que darme una mano, me estás creando un submundo que le da sentido a la vida, algo que me hace mucho ruido cuando pienso en este viaje que se acerca. Diste nombre a mi secta que no es una secta, en la cual no seremos más que tres mediocres intentando reirse de la cotidianeidad, pero ahí vamos, quiero un tatuaje. Haré la lista de tareas a realizar, mientras te pido que agendes un abrazo, se viene el frío y esto puede ser fatal.

Estar volviendo a casa i ver gente haciendo compras, eso es bonus track.

Namahá .

Cinco horas, poco más, poco menos, en las cuales logré uno de los mayores cuelgues de mi vida sin estupefaciente alguno. Solo tengo una cruel duda de un momento que no recuerdo qué sucedió y de repente desperté en una posición completamente diferente y con una frazada encima, cosa de la que jamás me percaté. Sí, analizándolo desde mi traumada visión, es muy secta, debí darme cuenta antes, pero... ¿qué más da? De algo hay que morir, si de repente dejo de expresarme en este medio quizás me hayan secuestrado. Pero no, o acaso me estoy olvidando de mi frase precursora: somos todos amigos.

Sale mfest? Haceme feliz, dale.

Ugly .

Asco. Asco, rechazo, frustración y más asco es lo que siento muchas veces cuando me miro en el espejo. Ojo, a veces también tengo esos días que me río y observo la sonrisa, aunque siempre resalto los defectos. Pero el tema del cuerpo... el tema del cuerpo es una gran mochila en una sociedad como esta, con los parámetros que tiene. Y hoy me dispuse a perder mi tarde de viernes a cambio de comprarme ropa, especialmente un jean era lo que quería, o tal vez lo que necesitaba. Y ahí vamos de nuevo... qué asco. No quiero verme más frente a un espejo, no quiero tener que ir más a comprarme ropa, no quiero vivir más eso que sueño cuando tengo pesadillas. Lo positivo de esos sueños fue que me mostraron que -una vez más- hay grandes problemas sin superar. Esa desesperación, empezar a correr a ningún lado, con el solo objetivo de escapar de algo que parece ser infinito. El pantalón que no me queda corto no me sube, el que me sube tenés que juntar doscientas personas para ayudar a prenderlo, y el que por esas casualidades prende termina apretando las piernas. Hacía bastante que no me sentía así, y lo peor es que siento que yo sola me meto en esas situaciones, pero claro, uno tampoco va a pasarse la vida en pijamas metido en su casa, aunque hoy lo considero la mejor opción. Creo que nunca caminé tanto ni tan rápido, verdaderamente sentía que necesitaba correr a un lugar, pero un lugar que no estaba acá. Y otra vez el nudo en la garganta, la decepción completa y el terror al espejo. Malditas modas, y maldita obsesión mía por seguirlas y querer ser como todos ellos. Estuve mintiéndome toda la semana cantándome que era hermosa a mí manera de ser hermosa, que había nacido así y demás. Pero basta, por más que escuche setenta y cinco veces ese tema, la realidad no cambia, y sigo pensando en los malditos talles. Otra vez plantearse el no comer, o lo otro que es peor, qué cobarde, ni siquiera lo llamo por su nombre. Pensar que vivir a energizantes y cigarrillos me va a salvar, o que un buen día voy a despertarme y ser como quisiera ser.
Entre tanto pesimismo voy a rescatar lo bueno de la mañana, llegando claramente tarde, con la compu bajo el brazo i la música quemándome los cesos, para encontrarme con vos y hablar tantas boludeces como los minutos permitieron, entre risas y caras que me salen sin pensar. Solo te pido que me banques hasta Junio, que estés conmigo hasta que me vaya, y que si no me llegara a ir por esas vueltas que jamás entiendo, por favor te quedes conmigo mirando el cielo, tomando un café calentito y fumando mientras escuchamos la música que vos quieras, porque sé que me va a gustar, y porque nunca me animo a elegir nada.

Una mfest que me cambie el humor por favor, gracias.

Pony .

No me digan que el mundo se termina este sábado, me da miedo, paradójicamente, ¿no? Pero es que en caso de que eso sucediera... A dónde queda mi viaje? Qué pasa con eso? No, basta, creo que tengo miedo aunque así no lo quiera. Por favor vení y dame un abrazo, teneme abrazada mientras escuchamos esa música de mierda y grito en mi interior, hasta que todo pase. Ataques de pánico si los hay, no me imagino la evolución de este desastre.

Love is in the air.

Lejos .

“Pedí pista” nos decía papá cuando alguien se colgaba en el aula, haciendo referencia al dialecto de quienes andan en avión y se pierden, algo así. Eso necesitaría yo ahora, pedir pista, pedir pista urgente de dónde es que estoy, de qué es lo que estoy haciendo. También me gustaría escucharlo a él diciendo eso, haciéndome reír como tantas veces, incluso cuando me hacía enojar. Es que a veces me pongo a pensar en la cantidad de cagadas que me mandé, y entiendo un poco cómo se sentían hace unos años, y eso que las peores cosas no las saben, algunas porque fueron más adelante, aunque todas venían peleando el podio desde que tengo dieciséis años. A veces pienso en lo orgullosos que están, y en cómo se equivocan, yo no estaría orgullosa de tener una hija como yo, o tal vez sí desde el punto de vista de que siempre tuve que arreglarme sola, entonces las salidas podrían ser entendibles. De todos modos insisto, si de verdad supieran algunas cosas, no sería lo mismo, y si no las saben es por eso, porque no puedo generarles ese daño, además de que no me gustaría perderlos y sé que eso sería muy probable.

Como si esta novela no fuera ya un gran mix de cosas sin sentido, de cosas malas repitiéndose y buenas alejándose hasta parecer inalcanzables, llegando al final se pone todavía más increíble. Se agrega una secta neonazi destructiva, yo sí que las tengo todas eh, pero sigo pensando que ese lugar me hace bien, y si me lavan el cerebro… bueno, ya se verá, o no, y así habrá tenido que ser. Secta neonazi destructiva, vuelve a repetirse esa palabra en mi cabeza, mientras no sé si reírme o llorar porque no hay una sola cosa que me salga bien. Secta neonazi destructiva, ¿en dónde te metiste, merock?

Te pido que me acompañes a cambiar de aire, a ver el cielo y el mar.

Miniatura .

Una vez más descubrí que todo esto es euforia, que más allá de las sonrisas nerviosas y los buenos momentos mi cabeza me lleva nuevamente a donde no quiero ir. Que el estar rodeado de cientos de personas no significa compañía, y que el estar con uno mismo no significa soledad. Por primera vez necesité aislarme dentro de la facultad, contradictoriamente, porque siempre es ahí donde le digo al Ego que no moleste, que Alter está intentando sociabilizar y dejar de lado los conflictos, y por primera vez también me sentí mal al pensar en mi viaje. No por una cuestión de querer o no querer realizarlo, pero sí probablemente por una cuestión de pensar en que queda poco tiempo, que últimamente pasan mucha cosas, y que a decir verdad, es todo muy incierto. Vinieron a mí todos los fracasos asumidos y por asumir, y muchas ganas de llorar. Hubiera necesitado un abrazo, pero claramente no era el momento, ni el lugar, aunque creo que esto va más allá. En materia intelectual las cosas van mejorando, ayer excelente y hoy bien, y sin dudas atribuyo estos logros a la mfest. Sí, soy re pesada, como con el otoño, pero sin dudas trajo una energía que genera cambios. En conclusión puedo decir que creo que todo esto es un twister de emoción, y que lo que me está matando es la inseguridad, ya lo dice ska-p: Somos los miedos que producirán tu depresión. No puedo bajar los brazos, al menos, pienso que no debo bajar los brazos, solo por un par de semanas, volver a esa sonrisa, recordando a mi pequeña hermana justificarse diciendo que "nacio así" mientras suena esa canción de Lady Gaga. Arriba entonces, que las depresiones no son buen refugio.

Es preferible el sol, sin dudas.

Fuego .

Reitero lo dicho hace unas horas, si no controlo mis nervios y esta euforia acabaré por explotar.

Twister de emociones.

Mfest .

Tal como lo había anticipado en otra entrada, hubo programas de Discovery, muchas charlas, cerveza, más y más tabaco, música de la onda, claramente un combo perfecto, en el cual no pude encontrar nada que hiciera que esto cambiara, aunque siempre queda abierto el espacio para que eso suceda. Mis increíbles nervios arriba de ese colectivo, por favor, hacía siglos que no me temblaban las piernas de esa manera, menos mal que el chofer se copó e inventó una parada en donde yo necesitaba bajar. Cuánta energía, y cuánta tranquilidad a la vez, son esos comentarios, esas expresiones, esos gestos... genial es una buena palabra, sí. Quiero volver a esas más de seis horas cantando NOFX, Green Day, MXPX e incluso Shakira, porque hasta en eso nos parecemos. Cuando quieras se repite, quiero volver a abrazar el almohadón de Thing 1-Thing 2, cuánta ternura y qué rico perfume. Solo me queda medio dudoso el tema de la privacidad de este evento, pero no me importa, no me importa nada, quiero otra Mfest.

¿Vamos a ver bbk?

Aum .

Luego de tres meses se dignaron a llamarme, aunque me encargué de hacerles conocer mi fastidio, y si un día finalmente voy ya pensé la frase irónica con la que haré referencia a esta situación. Contradictoriamente, me permití decir que me habían arruinado el día, desde el punto de vista que ya estaba logrando un nuevo submundo que me estaba entreteniendo, esas cosas que uno se permite para intentar salir adelante. La meditación es clave, no cambiaría por nada ese ratito los viernes, cuando me reciben con un abrazo y mucha alegría, y trabajamos la energía logrando esa conexión que tanto anhelo. La profesora tiene un vínculo especial conmigo que me hace pensar que realmente puede ver más que los demás, no sé por qué pero presiento que detrás de esos abrazos y afecto hay una clara demostración de que sabe mucho de mí, de que puede ver cómo están las cosas. Y no hacen falta presentaciones, ni contar a qué me dedico, de dónde vengo o lo que hago acá. Es sentarse, es cantar buscando la conexión con quienes nos ayudan en la liberación. También un hombre me miró bastante, pero asumo que le debe llamar la atención mi edad, dado que soy la más chica. ¿Y lo demás? Ahí viene, buscando más de lo mismo, buscando cruzar este océano y llegar de una vez a la orilla. La mañana de hoy fue tierna, sí, utilizo esa palabra para referirme siempre a lo mismo, me parece que es la manera. Los profesores están enojados pero busco dejar de lado todo eso, mientras intento abrirme y que los demás sepan cosas de mí. Ayer también me encargué de contar varias guerras de mi vida a alguien que creía de mí todo lo contrario, fue muy positivo porque no me juzgó, y de paso me encargué de sacarme la careta que allá por el dos mil nueve me había puesto para ser aceptada.
Me planteé la hipótesis de que tal vez lo positivo de este año vaya a ser eso, que no es tan malo como lo pienso porque en definitiva tengo que equilibrar todo con los errores que cometí en el dos mil diez. Aunque a veces piense, volvé dos mil diez, te perdonamos, me parece que esto es más cercano a una solución. Si hay una expresión que defina mi estado ahora creo que es no sé, porque realmente no entiendo, pero cuando hice filosofía aprendí que eso hace a la vida interesante. Tomar decisiones intentando pensar en mí también es una buena opción, traída por ella, una persona que me puso la vida en este año y que me muestra que no soy la única que comete tantos errores, todos juntos. Ella hace terapia, está muy satisfecha con su psico y a juzgar por los consejos que me da, claramente le está sirviendo. Podría decir entonces que hoy avancé respecto a eso, decir que no a veces es lo mejor que podemos hacer. Y esta vez dije que no por mí, pensando que tal vez deba poner fichas en una sola cosa y de lleno, y no intentar como siempre tener varias opciones a mano. Puedo ser tierna, lo sé, y creo que eso lo cambié mucho, creo que a pesar de todos los conflictos que me aquejan, cambié mi personalidad en torno a eso, soy algo completamente distinto a aquel ser que no permitía ni un abrazo ni una palabra de cariño. Vamos por más que queda poco, y con eso combato al Ego cuando todos los días le pide a mi cuerpo que se quede tirado fumando en casa.


Aum sri krishna namahá .

Ef planet .

♥
Tu campera combina con mis zapatillas, 
somos la generación 6.0, es clave que combinamos.








Eh, creo que también es clave mi estado. Saludos mis colegas.

Influencias .

No me recibiré más pero prefiero setenta y dos veces esta vida, ir en auto, pasando semáforos en rojo, escuchando música, llegando tarde, yendo al bar, perdiendo la hora de entrega, tomando cerveza y fumando. Las caras de complicidad, la observación en su estado más pleno, porque tengo que seguir intentando resolver todo. Si la torpeza trae aparejado algo positivo, quiero la torpeza todos los días, todos los martes en realidad, dale? Sigamos imaginando una historia que quizás no vaya a ningún lugar pero que nos entretiene todos los días, está bueno fomentar la imaginación, de eso viviremos. Brindemos por más cervezas, más charlas en el bar, entre miradas y conversaciones a medio entender, y algún cuasi abrazo que algún día terminará de mutar. Ahora, si el profesor impide eso me cae peor que antes, y lo copado fue que en el medio de toda esa nada y ese todo al que no sentía pertenecer, dije algo muy sentido: "me encanta el otoño", mientras miraba las hojas del estacionamiento. Vayamos a cantarle al sol, a la luna y a quien vos quieras, te dejo elegir.

Ternura, palabra repetida.

Karma .

Aunque no entendió lo que le pasó ese martes .

159

Hoy me fui a Quilmes, hacía frío y yo no sabía bien a dónde iba, dónde bajar, cuánto pagar, etc. Mi frase al colectivero fue "No sé bien a dónde voy, cobrame más o menos". Habrá creído que estaba drogada y accedió. Todo el camino fui imaginando qué sucedería si me bajaba en ese lugar, todo completamente desconocido y de un nivel socioeconómico que debería dejar de existir, porque es muy injusto. Contemplé la vida de barrio, la gente humilde pero trabajadora, esa que merece todo porque brinda a sus hijos educación y no malos ejemplos. Los chicos jugando a la pelota en la calle, las señoras haciendo los mandados para el almuerzo en familia, esas cosas que me recordaron un poco a mi infancia, cuando me gustaba despertarme temprano los domingos para jugar al supermercado o a la científica mientras papá cocinaba el asado y mamá cebaba mates. Las hojas del otoño, ese sol que parece abrigarnos el alma, enfrentado a toda esa crueldad que ansío se termine. Luego llegué, con muchos nervios porque tenía miedo de perderme, pero mi GPS mental todavía funciona un poco. A lo lejos me saludaba mi primita, dándome la bienvenida y felicitándome por no haberme perdido. Tan tierna, tan increíble el vínculo que logré ahora si pienso que de chiquitas no la podía ni ver, una vez me pusieron en penitencia por patear su cabeza. Sí, era violenta si me molestaban. Volver a ese lugar que hacía más de un año que no iba, con su olor y sus características propias, el abrazo con mi madrina que sé que no puede creer como he cambiado. Los diálogos, los chistes, y entre todo eso papá y mamá, y como si todo esto no fuera un combo feliz, Lu con sus teorías y gestos nerviosos, muy similares a los míos. El regreso a casa recordándome que el pánico aún no se fue, que todavía queda mucho por trabajar pero ante todo la satisfacción de los buenos actos, las pequeñas cosas que se irán agregando a la lista. Ya después uno queda inmerso en los temas de todos los días, y la rutina que agobia bastante, pero que también es la que nos hace seguir. Abrirse, expanderse, conectarse... esos términos que suelo repetir pero solo porque tienen un buen fin.

¿Que vas a morir de ternura? Yo voy a morir de ternura.

Montaña .

En esta especie de exilio que estoy transitando, exilio que no me molesta por cierto, aprovecho para pensar y tener en cuenta otros aspectos a veces ignorados. Esto de poder ir a meditar a un lugar me gusta mucho, aunque debo admitir que hoy la concentración no estuvo muy de mi lado. Sin embargo, hubiera pasado horas enteras sentada en el banco donde espero antes de ir a la sala de meditación. No hubo abrazos, y volvimos a trabajar sobre el AUM, esto es lo que se hace los sábados. Daría todo lo que soy a cambio de tener un mínimo recuerdo de mi nacimiento, algún recuerdo de cuando era bebé, quizás en aquel entonces todavía recordaba de dónde venía. Un fin de semana bastante nerd, pero lo más profundo que pueda. Quiero lograr esa conexión, necesito lograr esa conexión con lo que verdaderamente soy. Vuelvo como siempre al concepto de la libertad, y de que las cadenas las tenemos nosotros mismos.Y qué más? Sí, frenar. Hoy me explicaron por qué respiro tan rápidamente y me siento asfixiada, como ya dije en otra entrada, lejos está de tener relación con mi adicción al tabaco, sí tiene que ver con la angustia, pero lo más importante que aprendí hoy, es que la respiración va al ritmo de la mente. Mi mente está muy dispersa entonces, va muy rápido en todas las cuestiones que intento abarcar, y eso genera que no pueda respirar profundo, o lentamente. Intentaré ir por eso entonces, por ver si puedo empezar a controlarla y dejar de ser una marioneta. Comencé una lista de pequeños sueños cumplidos, cosa que se me había ocurrido hace unos días en el colectivo mientras pensaba sonriente en estos pequeños triunfos. Pediré toda la ayuda necesaria, para algo tenemos siete cuerpos, ¿no?. Ojalá pueda sumar algunas victorias más antes de partir, entre las que espero incluir algún espontáneo momento con vos, aunque nuestros retiros ya suman considerablemente. Sí, estoy hasta las manos.

Hablando de la libertad.

Ganesh .

Los viernes pueden tornarse muy interesantes, dado que creo que es uno de los días en los que más cosas fuera de rutina hago, claramente, porque no trabajo. La facultad me pone de mal humor pero siempre aparece alguien para cambiar eso, ya casi me parezco a Lu con sus teorías de los días de lluvia. Sí, mi hermanita dice que el chico que le gusta se fija en ella los días de lluvia, ojalá no sea un invierno seco. Hubo una situación extraña de un sujeto que pretendía entrar a mi departamento, menos mal que se activó mi neurona de desconfianza estimulada por la inseguridad de este sistema y no accedí. Luego quise ir al bazar, ese bazar gigante en el cual no compro muchas cosas pero despejo la cabeza, aunque hoy necesitaba algo para una maqueta. Estaba cerrado, y lo más cómico fue que lo habían clausurado, así que audazmente reemplacé los elementos con cosas de todos los días. Luego de enchastrarme un rato, me preparé para ir a meditación, pensando que sería como la última vez. Pero no, fue muy distinto, éramos más, nos mostraron más lugares del lugar e interactuamos con quien nos guiaba, esta vez de sexo femenino. No fue media hora de silencio y mantras como suele ser, sino que cantamos y conocimos dioses de varias culturas. Fue muy positivo, me sentí verdaderamente bien, y cuando me estaba por retirar la profesora me dio un abrazo. Mire usted, tanto tiempo rogando un abrazo y lo vengo a encontrar en un lugar prácticamente nuevo, con un persona desconocida y de mi mismo sexo. Ya me anoté para el retiro así que muy bien, me siento bien, como decía la publicidad de Hepatalgina. Las cosas siguen desordenadas pero de a poco se irán acomodando, e intentaré no ser yo quien las ordene, aunque en algunas cosas deberé intervenir. Y después, lo de siempre, la sonrisa idiota que esta vez no es tan idiota, el sin sentido y la incertidumbre propia de estos momentos. La palabra genial, junto con otras tantas, mezcladas en un diálogo que todavía no sé qué género tiene, pero que sin dudas llevará al menos un capítulo más en esta historia.

Siento que quedó muy vacío cuando era todo lo contrario.

Kate .

Quiero ir a cantar esta música de mierda, quiero ir a un reci, quiero que tomemos un café mientras caminamos bajo el sol calentito del otoño pisando las hojas amarillas, y luego fumar bajo ese mismo sol, o las estrellas si se hace de noche, porque no me importa cuánto tiempo pase. Quiero sentarme a esperar eso que me quita el sueño, pero creo que no quiero esperarlo sola. Eso es, definitivamente. Es Kate.

Transformer .

Y si dejamos todo a la mierda y nos vamos a fumar juntos? Sí, ya perdí la cabeza de nuevo.