martes, 5 de junio de 2012

Armado

Cada paso que damos, cada metro que avanzamos, nos acerca más a la historia. No basta con vislumbrar el final del trayecto, sino observar cada lugar que pisamos. Y nos mantenemos siempre en movimiento, porque sabemos que la lucha es eterna, y nunca dejaremos de avanzar. Porque nuestras armas siempre serán las más fuertes. Porque miramos al costado y vemos muchos más como nosotros. Porque no debemos aceptar aquello que nos ofrecen con una sonrisa y una puñalada por detrás. Porque mientras el mundo siga siendo injusto, no hay posibilidad de echar la cabeza hacia abajo. No quedan motivos para no pelear. Creo que estas oraciones en profundidad tienen relación con la última entrada, por lo que no creo necesario ir mucho más allá de la metáfora increíble que nos describe el estado inminente que transitamos. Es el caos, la revolución, y acá tenemos que estar. Lo único que vamos a necesitar es alguien que nos tome de la mano, nos abrace fuerte o nos acompañe a tomar un café mientras esperamos a que todo pase. Venimos bien, creo que me gusta así.

Ya no existe acá .

No hay comentarios:

Publicar un comentario