Me está dando vueltas la cabeza para atrás, se me traba la lengua. Pero estoy respirando bien amigos, buenas noches para todos ustedes. Hoy en un momento pensé que estaba muy ocupada en el trabajo, no sé. Hicimos unas gráficas y luego un videito, mientras mi jefe me decía que mis omóplatos son sexies. Iuuuju, sexy. Habiendo culminado mi horario en la oficina, me fui al Palacio, donde conocí al famoso padre de Súperman, y este es famoso en serio porque sale en la tele, produce, qué se yo, es facho además. Me miró con cara de baboso cuando entré hasta que vio que saludaba al hijo. Diud, demasiado. Me fui al recinto, donde estaban todos los tacheros, todos very happy porque les aprobaron la ley, y luego entré a ocupar mi sillita cuando me di cuenta que estaba rodeada de docentes, que luego de festejar también, se retiraron. Alegría, me quedó la vista despejada. Ahí lo vi a Fer que me sonrió y yo hice cara de idiota mientras me ponía colorada, al tiempo que recordaba lo bello de diciembre, ¿Sofía estás nerviosa?, te va a matar, me estás siendo infiel y toda esa perolata. Qué bello es. Después saludé con más verguenza a Cristian mientras me imaginaba cómo podría cambiar mi vida con solamente un llamado telefónico, qué hubiera pasado de haber aceptado ciertas propuestas, y demás. Y Cuando salía de mi cuelgue farandulero, me indignaba con las pelotudeces que plantea la oposición, entonces fastidiaba por twitter a Maria José y a Aníbal, que encabezan mi lista negra ahí adentro. Bueno, no sé, me colgué pintándome las uñas, es mega tarde y ya no sé qué hacer conmigo. Me preocupa un poco esto de no hablar con vos pero bueno, así se dio la cosa, así quiso tu suerte. Yo les dejo todo servido en bandeja, si no se dan cuenta... Viste, nada.
Comerse a besos esta noche, total nadie lo va a notar .
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